Miami, 24 de agosto de 2025. – El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, intensificó esta semana sus críticas contra el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, acusándolo de demorar indebidamente en el recorte de las tasas de interés.
Trump aseguró que las tasas deberían haber sido reducidas hace ya un año, una medida que, según él, habría beneficiado a consumidores y empresas al reducir los costos de financiamiento e impulsar la actividad económica. Estas declaraciones se producen en medio de un escenario macroeconómico complejo, marcado por señales mixtas en el mercado laboral, presiones inflacionarias persistentes y expectativas renovadas sobre la política monetaria de la Fed.
La posición pública de Trump acentúa la creciente tensión entre el Ejecutivo y el banco central, reavivando el debate sobre la independencia de la Reserva Federal, considerada un pilar del sistema financiero estadounidense para evitar presiones políticas en la toma de decisiones económicas.
Expertos en economía advierten que una reducción anticipada de tasas podría estimular sectores como la vivienda, el consumo y la inversión empresarial. Sin embargo, también alertan sobre el riesgo de sobrecalentamiento de la economía si dichos ajustes no se calibran con cautela, ya que podrían reavivar presiones inflacionarias.
Esta intervención del presidente se enmarca en una coyuntura preelectoral donde los temas económicos —tasas de interés incluidas— ganan relevancia en el discurso público, reflejando tanto las expectativas como la presión política sobre la política monetaria del país.